Papel y huesos
Desde las páginas de un cómic hasta los fotogramas de una película
Ojos desmesurados y chispeantes, pompas de jabón evanescentes y tiernos corazones flotantes, kilómetros de pentagramas y notas musicales forman el fondo de un universo, perpetuamente en rosa, suspendido entre el sueño y la realidad. Y de nuevo: animales de peluche y avalanchas de caramelos, el culto a lo lindo que se convierte en estilo, cintas de colores, lindos lazos y encajes.
El manga y el anime femeninos son exactamente eso.
Pero también sangre, sudor y lágrimas, la sonrisa del malo de turno, orgullo y determinación, lealtad y tenacidad, dolor y coraje, vida y muerte, caer y luego volver siempre a ponerse de pie.
El manga y el anime femenino también son esto.
En un mundo donde todo es lo contrario de todo y donde se puede reír y llorar casi al mismo tiempo, los inolvidables protagonistas de estas series nos acompañarán, con la dulzura y disponibilidad de las azafatas de línea, en el último y más apasionante viaje de la máquina del tiempo.
Desde el Versalles de Lady Oscar hasta los verdes pastos de Heidi, pasando por el calvario de Candy, en equilibrio entre el viejo y el nuevo continente, el surrealista Olimpo del bonito Pollon y los improbables Reinos de la Magia, llegaremos al escenario de un concierto de rock y campos deportivos desgastados que están varados hasta que ven ondear la capa de un superhéroe ...
En cierto momento, sin embargo, nuestras heroínas, que se escapan de las páginas de un cómic o de los fotogramas de una caricatura, se trasladarán a un mundo de celuloide. Cansados de la bidimensionalidad estática de una realidad diseñada, llegarán a la tridimensionalidad dinámica de una realidad real, dejando así de ser personajes de papel para convertirse en personas de carne y hueso… perdón papel y huesos.
¡Así que solo tenemos que abrocharnos los cinturones de seguridad y comenzar la cuenta atrás!
